El pequeño continente:
...es el nombre por el que se la conoce pues en ella la naturaleza ofrece toda clase de paisajes, con una vegetación europea, americana y africana. Lo más característico de su fisonomía son los barrancos, que afluyen desde sus cumbres centrales, a más de 2.000 metros de altura, con sus inmensas rocas de granito, hasta el mar.
No hay tierra que presente tal diversidad y contraste de paisajes como esta isla, que tiene zonas desérticas junto a montañas de frondosidad tropical; abruptos acantilados frente a extensas playas de arena, y escarpados barrancos frente a suaves valles de plataneras. Una excursión por la isla en coche, impresiona y sorprende, cuando en pocos kilómetros se cambia tan drásticamente de vegetación y hasta de clima. Especialmente en invierno cuando los turistas se tuestan al sol en las playas al mismo tiempo que las cumbres de las montañas están nevadas.